Elecciones de diputados para las Cortes de Cádiz (Chile)
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Las Elecciones de diputados para las Cortes de Cádiz en Chile se desarrollaron después de que la Junta Suprema Central y Gubernativa del Reino de España, ante la invasión napoleónica y el secuestro del rey Fernando VII, convocó desde Sevilla a las cortes de la nación que debían reunirse el 1 de marzo de 1810, llamando a los territorios hispanoamericanos a enviar representantes a la península.
• 1811 → | |||||||||||
Elecciones de Diputados para las Cortes de Cádiz 1 escaño en las Cortes de Cádiz | |||||||||||
Fecha | 7 de noviembre de 1809-16 de febrero de 1810 | ||||||||||
Tipo | Parlamentarias, nivel de Capitanía | ||||||||||
Demografía electoral | |||||||||||
Población | 800,000 aprox | ||||||||||
Resultados | |||||||||||
Manuel Manso – Realista | |||||||||||
Cabildos obtenidos | 3 | ||||||||||
20 % | |||||||||||
Miguel Eyzaguirre – Moderado[1] | |||||||||||
Cabildos obtenidos | 2 | ||||||||||
13.3 % | |||||||||||
José Teodoro Sánchez – | |||||||||||
Cabildos obtenidos | 2 | ||||||||||
13.3 % | |||||||||||
Judas Tadeo Reyes – Realista | |||||||||||
Cabildos obtenidos | 1 | ||||||||||
6.6 % | |||||||||||
José Ignacio Cienfuegos – Patriota | |||||||||||
Cabildos obtenidos | 1 | ||||||||||
6.6 % | |||||||||||
Joaquín Fernández de Leiva – | |||||||||||
Cabildos obtenidos | 1 | ||||||||||
6.6 % | |||||||||||
Ignacio Godoy – | |||||||||||
Cabildos obtenidos | 1 | ||||||||||
6.6 % | |||||||||||
José Ignacio Guzmán – | |||||||||||
Cabildos obtenidos | 1 | ||||||||||
6.6 % | |||||||||||
Juan Martínez de Rozas – Patriota | |||||||||||
Cabildos obtenidos | 1 | ||||||||||
6.6 % | |||||||||||
José de Santiago Concha – | |||||||||||
Cabildos obtenidos | 1 | ||||||||||
6.6 % | |||||||||||
Juan Antonio Ovalle – Moderado | |||||||||||
Cabildos obtenidos | 1 | ||||||||||
6.6 % | |||||||||||
Diputado por Chile en las Cortes de Cádiz | |||||||||||
Electo Ninguno Elecciones anuladas |
La orden fue comunicada a Chile en enero de 1809. En ella, España reconoce que sus dominios en América son parte integral de la monarquía española, y por ende los distintos dominios tenían que tener representación nacional.