Historia de los hospitales
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La historia de los hospitales comenzó en la Antigüedad con hospitales en Grecia, el Imperio Romano y también en el subcontinente indio, empezando por los precursores de los templos asclepíticos de la antigua Grecia y luego los hospitales militares de la antigua Roma. Los templos griegos estaban dedicados a los enfermos, pero no se parecían en nada a los hospitales modernos. Los romanos no disponían de hospitales públicos especializados. Los hospitales públicos propiamente dichos no existieron hasta el periodo cristiano.[1] Hacia finales del siglo IV se produjo la "segunda revolución médica"[2] con la fundación del primer hospital cristiano en el este del Imperio bizantino por Basilio de Cesarea y, en pocas décadas, este tipo de hospitales se habían convertido en omnipresentes en la sociedad bizantina.[3] El hospital experimentaría un desarrollo y progreso en todas las sociedades bizantinas, medievales europeas e islámicas desde el siglo V hasta el XV. La exploración europea llevó los hospitales a las colonias de América, África y Asia. El Hôtel-Dieu, fundado en 1443 por Nicolas Rolin y Guigone de Salins, está considerado el hospital más antiguo en funcionamiento. En un principio fue una institución benéfica para los pobres, pero ahora es un museo conocido por su impresionante arquitectura. Por el contrario, el hospital de Mihintale, en Sri Lanka, fundado en el siglo IX d. C., es probablemente el sitio con las evidencias arqueológicas más antiguas de un hospital en el mundo.[4] Al servicio de los monjes y de la comunidad local, representa los primeros avances en las prácticas sanitarias.[5][6]
Los primeros hospitales chinos y japoneses fueron creados por misioneros occidentales en el siglo XIX. A principios de la era moderna, el cuidado y la curación pasarían a ser un asunto secular en Occidente para muchos hospitales.[7] Durante la Primera y la Segunda Guerra Mundial se crearon muchos hospitales militares e innovaciones hospitalarias. Los hospitales gestionados por el gobierno aumentaron en Corea, Japón, China y Oriente Medio después de la Segunda Guerra Mundial. A finales del siglo XX y en el siglo XXI se crearon redes de hospitales y organizaciones sanitarias gubernamentales para gestionar grupos de hospitales con el fin de controlar los costes y compartir recursos. En Occidente se cerraron muchos hospitales pequeños y menos eficientes porque no podían mantenerse.